
Para empezar es importante que sepas que el sueño y el estrés tienen una relación de co-dependencia. Es decir que, no dormir lo necesario puede provocar estrés.
La gran mayoría de las personas sabemos que existen muchas razones por las cuales priorizamos el tiempo para efectuar otras actividades y dejamos de lado la calidad del sueño.
Sin embargo, nunca debes escatimar con el sueño, ya que es realmente necesario para efectuar todas nuestras labores cotidianas. En el artículo de hoy te contaremos algunas formas en las que el estrés puede influir en la calidad del sueño y algunos consejos para que puedas mejorarla. ¡Comencemos!
No es una casualidad que en estos meses los niveles de estrés y ansiedad hayan aumentado de manera considerable ya que, los efectos de la situación actual ha afectado a toda la población: niños, adultos y ancianos.
Algunos de los factores más comunes asociados con el estrés, son los siguientes:
Ahora bien, no podemos dejar de lado un hecho: la forma en la que afecta el estrés al sueño puede ser especialmente severo en caso de que no lo manejemos de la manera correcta.
La falta de sueño acumulado no se debe tratar como un problema menor, ya que, puede causar enfermedades como la diabetes, enfermedades cardiovasculares, obesidad, entre otros.
Lo primero que hay que indicar es que, la forma en la que el estrés afecta al sueño puede ser muy variada. A pesar de que, el trastorno del sueño que más estrechamente relacionado está con el estrés es el insomnio, se pueden presentar otros problemas de sueño:
Para finalizar, es realmente necesario que tengas presente un aspecto importante: A veces, tú sólo no puedes con todo, por lo que, si la realidad te supera, no debes dudar en recurrir a un especialista. Dormir de la manera adecuada te permitirá vivir mejor, pero resulta difícil cuando la mente se encuentra encerrada en altos niveles de estrés.