
¿Alguna vez has estado estresado? Estamos seguros que tu respuesta es afirmativa, ya que todos los seres humanos hemos atravesado por períodos de estrés en algún momento de nuestras vidas. Es normal sentir estrés cuando nos sentimos bajo presión. Sin embargo, esto se convierte en un gran problema si se mantiene sostenido en el tiempo, es decir, si vivimos constantemente estresados. En la época actual en la que vivimos, es normal sentir un poco de estrés de vez en cuando, pero debemos cuidarnos del estrés prolongado, pues este puede generar serios problemas en el organismo.
¿Te gustaría aprender más sobre este tema? Si es así, continúa leyendo que en este artículo vamos a abordar el tema del estrés y cómo este es capaz de generar cambios a nivel de nuestro organismo, llegando incluso a propiciar la aparición de enfermedades.
¿Qué es el estrés?
Para poder entender los efectos del estrés en nosotros, lo primero que debemos hacer es explicar en qué consiste. Cuando escuchamos el término “estrés”, inmediatamente se nos viene a la mente la palabra “presión”. Y es que eso es el estrés, una presión o tensión que se desarrolla a nivel de nuestro sistema nervioso, producto de las diferentes experiencias y situaciones que debemos enfrentar cada día. También podemos decir que el estrés se da como respuesta a posibles amenazas que percibimos en nuestro entorno. Esas amenazas pueden estar relacionadas con cualquiera de los ámbitos de nuestra vida: laboral, sentimental o familiar, entre otros.
Ahora bien, es importante acotar que, a pesar de que la mayoría de las personas perciben el estrés como algo negativo, esto no tiene por qué ser así. Si bien es cierto que en ocasiones el estrés nos genera estados de angustia, también es cierto que muchas veces el estrés es lo que una persona podría necesitar para atreverse a hacer algo que nunca ha hecho. En este caso, el estrés actuaría como un elemento motivador. Sin embargo, en este artículo nos vamos a enfocar en cuando el estrés es perjudicial.
Fuentes de estrés en nuestras vidas
Muchas personas se preguntan, ¿de dónde sale el estrés?, ¿por qué las personas se estresan? Demos respuesta a estas preguntas.
Estarás de acuerdo con nosotros cuando te decimos que las fuentes de estrés son múltiples y que dependen de cada quien, del estilo de vida y de las ocupaciones. A continuación, te mencionamos los elementos principales que pueden generar estrés en el ser humano.
El dinero
Este es quizás uno de los elementos principales que pueden causar estrés en el ser humano, pues siempre estamos pendiente de cuánto dinero ganamos y de cuánto necesitamos para subsistir y cubrir nuestras necesidades básicas como la alimentación, los gastos de nuestro hogar y los gastos de salud, entre otros. Cuando a una persona no le alcanza el dinero o cuando tiene muchas deudas por pagar es probable que atraviese crisis de estrés.
Experiencias traumáticas
Las experiencias negativas de nuestra vida, en cualquier etapa de ella, suelen dejar un gran impacto en nuestras vidas que, eventualmente, pueden generar estrés. Esto es particularmente evidente en las personas que han sufrido maltratos de niños o algún tipo de abuso, así como también en las personas que han atravesado por desastres naturales o accidentes.
Situación laboral
El empleo también es considerado una de las principales fuentes de estrés, sobre todo si las personas se encuentran sometidas a la presión de fechas límites o a un jefe déspota. Así mismo, en nuestro trabajo siempre nos sentimos sometidos a la presión de cubrir las expectativas que se tienen sobre nosotros. Por supuesto, siempre queremos ser los mejores, pero hay ocasiones en el que lograrlo se hace difícil y aparece estrés.
Otras fuentes
Entre las demás fuentes de estrés podemos mencionar las relaciones interpersonales, como por ejemplo, las relaciones de pareja. Cuando hay problemas conyugales, es común llenarse de estrés, especialmente si estos son graves, como por ejemplo una infidelidad o incluso un divorcio. Así mismo, las otras relaciones familiares también pueden generar estrés. Por ejemplo, hay personas que llevan una muy mala relación con sus padres o hermanos y esto les produce una gran carga de estrés.
¿Puede el estrés dañar nuestro cuerpo?
Probablemente a estas alturas te estás haciendo esta pregunta y la respuesta es que sí. Definitivamente, los cambios fisiológicos que desencadena estrés en el organismo pueden hacer mella en este, cuando el estrés se mantiene durante mucho tiempo o de forma permanente. Esto se debe a que durante los momentos de estrés nuestro cuerpo se pone en estado de alerta y libera una serie de hormonas que desencadenan diversos efectos en nuestro cuerpo. Las más conocidas de estas hormonas son la adrenalina y el cortisol. Ahora bien, veamos cuáles son esos efectos.
Sistema circulatorio
A nivel del sistema circulatorio, el estrés genera un incremento de la frecuencia cardiaca, es decir, el corazón comienza a latir mucho más rápido. Además de esto, se incrementa también la presión arterial, debido a que hay vasoconstricción. Esto implica que el diámetro de las arterias se reduce.
Sistema digestivo
En el sistema digestivo, el estrés desencadena una gran cantidad de cambios que resultan muy incómodos. Entre estos podemos mencionar acidez, reflujo gastroesofágico, estreñimiento o por el contrario, diarrea.
Así mismo, el estrés prolongado ocasiona que se incremente la producción de glucosa por parte del hígado, lo que puede generar un aumento del riesgo a padecer enfermedades como la diabetes y todas las consecuencias que esta acarrea.
Sistema respiratorio
Cuando se atraviesan procesos de estrés, se incrementa la frecuencia respiratoria, lo que puede ocasionar que la persona hiperventile. A la larga, esto puede ocasionar muchos problemas como por ejemplo el asma.
Sistema inmunológico
Si el cuerpo se encuentra en un constante estado de alerta, las defensas naturales se ven disminuidas. En consecuencia, la persona que padece estrés crónico se vuelve vulnerable al ataque de cualquier agente patógeno como virus o bacterias.
Otros efectos
El estrés constante interfiere con los niveles de ciertas hormonas sexuales, lo que ocasiona, en primer lugar, una disminución de la libido. Además de esto, en los hombres puede incluso generar disfunción eréctil.
Igualmente, el estrés puede ocasionar dolores de cabeza frecuentes y también dolores a nivel muscular.
Como puedes ver, el estrés en algunas ocasiones resulta positivo, porque nos impulsa a realizar acciones e incluso nos ayuda a huir o escapar cuando nos encontramos en alguna situación de peligro. Sin embargo, cuando el estrés se mantiene en el tiempo, ocasiona la aparición de otras enfermedades que quizás puedan llegar a poner en riesgo nuestra vida.
Es por esto que, si llegas a detectar que tus niveles de estrés son constantes y se mantienen en el tiempo, es de vital importancia que busques ayuda con algún especialista, quien es el indicado para proporcionarte las herramientas terapéuticas para superarlo.